Se nos ha planteado un interesante ejercicio: poner en marcha una segunda instancia del gestor MySQL instalado en una máquina concreta. No es una segunda instalación, es aprovechar lo ya instalado pero con dos servidores de bases de datos.
Tener dos instancias tiene toda la justificación que nuestras necesidades precisen. Podría ser que una se dedicara a desarrollo, para hacer las modificaciones y pruebas necesarias antes de trasvasar todo el trabajo al otro, al de producción, digamos "el de verdad". También serviría para tener una copia de respaldo. O simplemente por tener dos espacios diferenciados tanto en bases de datos como usuarios, una medida de seguridad adicional.
Sea como fuere, mostramos aquí el procedimiento para hacerlo, o uno de ellos. Lo cierto es que parece laborioso pero no es nada complicado. Tan solo necesitamos saber dónde están las cosas. Eso sí, la cantidad de cosas que pueden variar de un ordenador a otro, versiones, configuraciones, elecciones en la instalación, etc. hace que todo esto tenga más de una posibilidad de ser incompleto.